Description
Óleo sobre lienzo. Conserva tela original.
Presenta repintes.
Medidas: 96 x 69,5 cm.
Imagen alegórica en la que el autor ha retratado a un anciano en primer plano. El anciano es representado junto a una hoguera, acercando sus manos al fuego. Inscrito en un paisaje dominado por la presencia una casa, la escena presenta un interés por la pintura de género, ya que en cierto modo muestra una escena de carácter cotidiano. Sin embargo, esta temática que parte de lo periódico, armoniza con lo conceptual, tratándose en definitiva de una obra alegórica. Un concepto que nace de lo natural de la vida cotidiana y popular y que a la vez entronca con la idea de representación de un anciano en sus últimos años de vida, mostrando así el fin de un ciclo. Se puede observar cómo ha encendido una hoguera y se sienta a contemplarla, trasmitiendo al espectador cierta calidez, que de define por su acto y por las cualidades del fuego. Esta hoguera y sus brasas iluminan las manos del anciano, sin embargo cabe citar que el pintor ha utilizado para la composición una luz de carácter irreal.
Los retratos alegóricos surgieron desde la edad media con la intención de exaltar las cualidades y las situaciones de la vida. Este tipo de retratos fueron utilizados para exaltar las cualidades de un personaje en concreto, como por ejemplo reyes, o personalidades reconocidas. De hecho, durante el neoclasicismo esta corriente volvió a estar en boga. En este caso en concreto no se trata de un personaje reconocido, sino que el pintor ha querido reflejar el concepto inicial del uso de la alegoría en el arte pictórico.
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